Hace millones de años la tierra sufrió un golpe desgarrador. Esta colisión determinó se fragmentara y se formara lo que hoy conocemos como luna. La luna, como parte de la tierra, alter ego, sombra y luz, domina ciclos y mareas. Sería inconcebible nuestro mundo sin ella. Este poema utiliza la metáfora del nacimiento de la luna, para aquellas situaciones que, si bien nos desgarran, suponen un nuevo comienzo.
A veces,
ese golpe violento y seco
que nos lleva al abismo
es curiosamente un nuevo comienzo,
polvo de estrellas que trasluce
el contorno de mi galaxia,
siempre errante hacia tu poniente,
Un desgarro de luz,
ese alarido sin sonido,
se transforma en luna,
conjugando la suerte de mis mareas.
Sin esa luna
no existiría el viento abanicando mis orillas
ni las olas que suavizan el agreste corte de mis rocas,
y esa atmósfera azul que tanto sobrecoge
todas tus bienvenidas.
En la textura de tu desgarro, cielo.. simple ausente lejana, pero nunca hierática, se halla la síntesis del viento, silvando sobre la roca, como en la obra de Chillida
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ohhhh😍, qué comentario en pura poesía!! Gracias!!
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Qué hermosa metáfora. Y muy cierta. Un abrazo
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Gracias 🎈🎈
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wow, Wow!!! (TWICE)
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Ohh, gracias!!!😊😊
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Muy hermoso, me encantó.
Abrazo de luz.
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Gracias!Abrazo!!!
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Si hay luna, aquí vengo, y si no hay también jaja.
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Jajaja. Abrazo y gracias por pasar por aquí!
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Reblogueó esto en Directas & Indirectasy comentado:
Y vaya golpe a veces
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Gracias😊
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