(In memoriam  del poeta José Angel Valente)

 

Hoy es un día de aquellos

que tus palabras son martillo de mis dedos,

recuerdas,

“  me he despertado como siempre, con un cuchillo clavado

y nadie ha consumado mi homicidio”,

los vientres ya no yacen junto al mar,

y en una caja fuerte se guarda la promesa

de una auténtica vida.

Voy mirando las calles

buscando tu lugar,

ahora,soy yo, la que doy vueltas

a ese cuchillo enfermo, engatillado

imaginario, traslucido, indeterminable

quizás siempre ausente

y tan presente

en las llagas que cubren nuestras bocas

 

Y seguimos aquí,

con los cuchillos suicidas

inmolando nuestro siglo

y las cicatrices de nuestras caras

en las humedades de las cámaras.

 

Todo es susceptible de empeorar,

el fulgor posmoderno fagocita los óvulos

de las generaciones de poetas

13 comentarios en “El cuchillo de la posmodernidad”

    1. Aquí me centro en la poesía de Valente, su transcendencia, ahondando desde dentro sobre una realidad desdibujada que machaca lo humano. Valente no apostó por el mercantilismo posmoderno, sino por una linea mística y fue muy reconocido. No se que ocurriría hoy frente al mercantilismo editorial de lo pseudo poético, por eso hablo de los óvulos de poetas nuevos q se fagocitan.

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      1. yo no sé si es postmodernismo, o es como el vino que o te gusta o no, a veces leer un poema , es facil si no te metes dentro de él, a mi me gusta tratar de entender, y ver que es lo que me dice, y este poema me gusta, ojala yo escribiese como el, pero me conformo con lo que hago, jejejeje

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  4. Los cuchillos nos atraviesan cada día,
    difícil adivinar de donde vienen,
    imposible saber quien los empuña,
    se nos van clavando uno a uno
    desangrando nuestra vida en un segundo
    y empañando para siempre el futuro.

    Un abrazo, Pilar.

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