Tú me sabes a café de la mañana, 

a la asonancia libre, el tendedero

            de galería al sol, madera blanca,

             luciente entre las tejas y persianas.

            Tú me sabes a tarde y avellana,

           al verde que desviste la montaña,                

a un pantalán de dunas, pasarela

             a castaña de otoño y a morera,

             a soportal, a tientas, a bengala.

              Tú me sabes al vaho en los cristales,

              al musgo renaciente en las aceras,

              torbellino, aguacero y vendavales.

              Tú sabes a solsticio, tras la hoguera,

              a esa fuerza del fuego que me aboca

               por ser caricia, eterna viajera

              reclamando la fruta de tu boca

              por esta vez, y por las venideras

               Tú me sabes a verano entre las rocas,

              Tú me sabes a mayo en primavera.

29 comentarios en “Tú me sabes”

  9. Tú me sabes a nubes de azúcar de algodón
    relamiéndome, cual un niño, de satisfacción.
    A la limonada que, según la vas bebiendo,
    en verano la sed sacia y te vuelve comodón.
    Tú me sabes cómo esa inolvidable canción,
    la que de día tarareo y me arrulla durmiendo.

    Tú me sabes a la sopa de letras,
    la misma, que tu nombre compone.
    Yo, en cada cucharada, te tomo
    y tú, en mi paladar, te compenetras.
    Tú me sabes a los versos que compone
    el poeta que, cada noche, yo retomo…

    Saludos Pilar 🥂 ✋

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