Flores

  Un mensaje anónimo

  corretea en los espacios en blanco de mi agenda

  y me pregunta, qué se puede aprender de una flor.

  La flor florece sin temer que un día se marchite

  sin anclarse a la imagen de sus pétalos, cayendo,

  sobre la hierba de invierno.

  Ella sabe que es peor no florecer.

  Esconderse en el tallo de la planta, en el proyecto que no fue.

  Por eso florece libremente, generosa. Ella es el fruto

  para venideras floraciones. 

Quiero

            Quiero momentos pequeños

             en los que aparcar el tiempo

             en el regazo de las olas.

             Pero mentiría si dijera

             que las cosas pequeñas son las únicas

              que mueven mis sentidos.

             Quiero momentos grandes, rompeolas,

             el viento que al reloj pone de vuelta

             desgobernando los minutos.

            Quiero aquellos sencillos gestos

            que hacen apacible mi regreso

             y adornan el mensaje de futuro

             con un bosque de besos.

             Pero mentiría si dijera que me basta

             con una ruta de pequeños pasos

             o el débil sonido del café caliente.

              Quiero saltar la ventana de los días

              y empaparme del agua de la lluvia

              la huella del fractal que nos conecte

              quebrando las fronteras.

              Quiero, sin duda, demasiado…

              aunque confieso

              que como todas

               me aferro a los buenos momentos

               y sueño….

Una historia perdida

Hay una historia perdida

en algún sitio

que habla de fantásticas leyendas

y aspira a tomar cuerpo

en cualquier libro

como una mano invisible

de inmortal escriba

que teje estrofas, besos

cual sonidos

que anidan la cintura de tus ojos.

No hay lágrima que escape al año nuevo

y sin embargo,

aunque no lo parezca

los rayos de luz iluminan las hojas

del árbol que en el patio resucita

pese al viento fiero y a la escarcha.

Ningún corazón desfallece tanto

que no tenga reservas de esperanza.

Hay una historia pérdida

que está esperando tus abrazos.