En muchas ocasiones me gusta pensar en el universo espejo. El abc recuerda en un artículo la conocida teoría de Barbour sobre la falta de preexistencia de tiempo. “El tiempo no es algo preexistente -explica Julian Barbour, de la Universidad de Oxford, a la revista Quartz-. Y debemos deducir su dirección y su flujo a partir de lo que sucede en el Universo. Cuando lo vemos de esa forma, resulta natural decir que el tiempo empieza en un punto original y fluye en direcciones opuestas.”
¿ Y dónde ese punto original? ¿En cualquier perspectiva? ¿ En toda existencia?. Si el tiempo no es una medida. ¿ Dónde está el presente?. Y es más…si la materia no es como la ves. ¿Existe o no Existe?. ¿Una partícula puede ser materia y antimateria a la vez?.
ENTONCES :¿Qué es de lo que estás seguro cuando afirmas que solo crees en lo que ves, en lo que ha ocurrido?
Lo cierto es que el materialismo, lejos de ser la negación del idealismo, es el mayor idealismo. descubrir que no tenemos nada claro es quizás más doloroso y valiente que pensar que solo existe lo que se ve o tiene dimensiones perceptibles y comprobables con nuestros limitados sentidos.
Vivir en el abismo o en el vacío- ausencia de total de materia- no es perderse, es vivir consciente. Quizás, paradoja, (lead you astray) no es perderse, sino encontrarse. Quizás….es broma….no lo aseguro