Doblo el papel del tiempo para verme
en el pasado aquel desdibujado
doblo el papel, en arco sobre el temple
lienzo de aquel otoño equidistante
imantada de luz, imaginada antes
Paseo por los templos de mis miedo
destronando las huellas aprendidas
y comprendo que el avance tiene un ritmo
y el retroceso es un paso necesario.
Aprendo a amar las piedras, el obstáculo
neutralizando la imagen del espejo
Tanto más libres somos cuanto menos
tenemos confiado en el ajeno
Y ahora vuelvo aquí, ya renovada
con soplo del ayer hacia el futuro
atrapadas las lunas de mis rostros
para dejar camino sobre el agua.