Llegaste malherido,
con la herida sangrante de una batalla interminable,
en el grial de tus sentidos.
Te ofrecí el silencio de las cuevas
el canto visionario de los pájaros
y la palabra
cual magia
sobre la palma de mis manos.
Puede, la poesía, tal vez, desenmascarar el secreto,
clamar a tierra abierta
y retraerte en delirio cada noche
mientras entremezclamos identidades,
puede, tal vez, ser luz y profecía
sobre la raíz del árbol fértil
que hace tintinear todas las campanas
cabalgantes
sobre la noche de los tiempos.
Y mientras dormitaste sobre mi regazo,
creo que comprendiste,
que no eras bardo errante
sino fuego
maleable a la materia de los versos
Aun te espero.
Sé que regresarás con la rama de oro,
la gran rama,
de la estirpe de todos los poetas.
…fuego maleable a la materia de los versos… 🤗
Magistral!!!
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Gracias!
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Magnifico poema cargado de una gran emotividad… magistral Pilar. Un abrazo
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Muchas gracias!!! Otro abrazoooo!!!!
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Precioso Pilar!!
⚘
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Gracias!!
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Grandioso!!
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Gracias!!!
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