La rugosidad de las caricias,

el tacto pasajero

de una mano altiva,

crujir de dedos en el arriate de las promesas,

de los verbos insatisfechos

y de las flores que nunca poblarán el mediodía.

 

Porque  todo eso no me complace,

prefiero la suavidad de tus arrugas,

la aspereza de tus manos,

y esos ojos, mar batido, mar abierto,

tempestuoso,

sobre el acantilado de mi ropa.

 

 

 

17 comentarios en “Circunloquio”

      4. Marwan? Con Salinas, Otero o Celaya?? Tú si que estás siendo revolucionario. No desmerezco el trabajo de Marwan, lo leo y lo escucho también…. Pero amigo, te estás leyendo a ti últimamente, es decir, te lees con distancia como si fueras otro?? Si te lees, verás que tienes que ocupar tu silla. Eres de los nuestros. I’m sorry …nunca serás intensito…sino pedazo poeta, no te seguirán hordas de adolescentes, pero te leeremos los y.las demás poetas. Y mira que a mi.me cuesta decirme poeta, pero creo que a ti también. Fuera del cascarón ya….!!!

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      5. Jajajaja… algún que otro verso medio interesante tiene el tal Marwan, pero le puede, creo, el escaparate. Me gusta aprender a hacerlo medianamente bien, creo que en ello está la esencia de la poesía, en sentirte parte del proceso y por supuesto no caer en el aplauso fácil. No lo hago por nada realmente, sale así, sin más… 🙃☺️

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      9. Impresionante articulo, cuanta verdad! Lo que no va ya conmigo es que el autor haya ganado premios…nunca entenderé por qué hay que concursar para que en tiempo record alguien que se cree con el don de juzgar tenga que darme o no su beneplácito

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